Investigación. –
Enseñé a leer y a escribir a dos de mis alumnos extranjeros en nuestro idioma. A los dos alumnos les correspondía escolarizarse en 2º de Primaria por su edad.
Uno de ellos acababa de llegar de Rumanía y no tenía el mínimo conocimiento de nuestro idioma. Yo desconocía absolutamente cuál era su nivel de lectura y escritura en su idioma, sólo descubrí que tenía fallos considerables en la escritura (hay letras que son iguales en los dos idiomas), como hice constar en la prueba inicial.