El Método al Revés de lectoescritura surge de la necesidad que sentí en múltiples ocasiones de enseñar a leer “de otra forma”.
Me preocupaba que los niños aprendiesen a leer pero también me preocupaba, y mucho, despertarles el gusto por la lectura, que tuviesen ganas de aprender, que les emocionasen los textos.
Siempre tuve presente que el objetivo de mi método de lectoescritura era que los niños aprendiesen a leer bien, considerando que lo prioritario eran los resultados que obtenía al aplicarlo, ya que las “filosofías gratuitas” y “las ocurrencias” nunca me interesaron.
En mis libros se trabaja sistemáticamente y de forma secuenciada la conciencia fonética, desde que el niño empieza a leer las vocales, para favorecer que los alumnos dominen y, poco a poco vayan automatizando, las reglas de correspondencia de los grafemas y los fonemas. Estas actividades facilitan notablemente el aprendizaje de la lectura.
Este método propone utilizar al máximo los sentidos y las diferentes formas para enseñar y aprender el mismo concepto. El objetivo es aprovechar nuestra relación con el medio para crear situaciones educativas en las que los niños puedan aprender en diferentes lugares y contextos.
Siempre fui consciente de lo importante que es el material que utilicemos. Un material bien adaptado, aplicado en su momento por una persona que valore lo importante que es la empatía y la maneje positivamente en el aula, consigue respuestas satisfactorias por parte de los alumnos, crea una buena atmósfera, facilita el trabajo del profesor y mejora el rendimiento escolar.
Si el método y el trabajo son buenos, los resultados indiscutiblemente tienen que serlo también y si no es así es que existen fallos en el método, en el trabajo o en ambos, que es lo más probable.
Estructura del Método al Revés de lectoescritura
El Método al Revés está formado por 5 libros de lectura con orientaciones para trabajarlos y seis cuadernos de fichas de escritura con las explicaciones oportunas.
Primer libro.- Se trabajan las vocales y grupos vocálicos apoyados por ilustraciones didácticas, divertidas y cercanas al niño. Para favorecer el aprendizaje de las vocales y grupos vocálicos utilizamos sistemáticamente las onomatopeyas.
El libro también va acompañado de textos muy cortos y motivadores para que el adulto los lea adaptándolos a las diferentes situaciones de aprendizaje.
Segundo libro.- Se trabajan las letras: r, s, n, l, p, sólo en las sílabas directas.
Tercer libro.- Se trabajan las sílabas inversas de las letras: r, s, n, l, p.
Se incluyen también las letras: d, j, m, j, t, f. Sílabas directas e inversas.
En mis libros están plasmadas las diferencias fundamentales de mi método con respecto a otros. No todo son novedades porque, evidentemente, aquí también está reflejado todo lo que aprendí de diferentes métodos de lectura que hicieron otras personas y que sin ellos, con toda seguridad, no hubiese podido hacer el mío. ¡Gracias!
Características principales del “MÉTODO AL REVÉS”
- Muy fácil de entender y explicar para profesores, padres y adultos.
- Muy motivador.
- Programa altamente estructurado.
- Muy secuenciado.
- Muy experimentado.
- Trabajo sistemático de las reglas de correspondencia grafemas – fonemas.
- El aprendizaje es lineal, por lo tanto acumulativo.
- Todo el sistema está basado en pocos pilares, pero éstos se mantienen constantes e inalterables durante todo el proceso.
- Muy razonado y basado en la lógica.
- Antidisléxico, antidisgráfico, antidisortográfico.
- La ortografía se trabaja desde el inicio, va dentro de todo el proceso. El método evita que el alumno interiorice el lenguaje oral y escrito con errores, (para impedir recuperaciones). Se le conciencia para que investigue primero e intente resolver sus problemas y, si no es capaz de resolverlos, pregunte siempre ante la duda.
- No es necesaria la recuperación. Es necesario el apoyo, el refuerzo y retomar el método, en cada caso, donde se dejó.
- El material de apoyo y refuerzo, es el propio método. Se refuerza con el mismo material que con el que se enseña.
- Carece de elementos superfluos que sólo sirven para captar la atención y percepción (limitada en estas edades) inútilmente. Todo lo que aparece en el método, tiene un por qué y una razón de ser.
- Afianza la lateralidad al estar continuamente utilizando conceptos espaciales como: arriba-abajo; derecha-izquierda etc.
- Se parte de la situación real de desarrollo del niño (zona de desarrollo próxima).
- No se pone al niño en situación de fracaso.
- Todos los alumnos intervienen a fondo en su proceso de aprendizaje y vivencian continuamente que son capaces de aprender, de avanzar.
- La motivación viene sola cuando el alumno toma conciencia de que es capaz de avanzar con total facilidad o con una dificultad razonable que puede superar sólo o con ayuda del profesor, padres…
- Tratamiento sistemático de Conceptos Básicos.
- El método trata de forma exhaustiva aquellos objetivos básicos que presentan una mayor dificultad para su adquisición.
- La unidad básica es la palabra.
- Máximo cuidado con la posición del cuerpo, con los materiales y con la utilización de los mismos.
- Sienta unas bases muy sólidas para el desarrollo progresivo de la escritura, lectura y comprensión.
Fundamentos del Método al Revés de lectoescritura
- La mayoría de los errores que presentan los escolares en el área de Lengua, tanto en lectura como en escritura, casi siempre se producen en el mismo momento y por causas similares. A veces les enseñamos ya con errores y como consecuencia aprenden e interiorizan mal, afianzando los errores.
Esta situación acaba repercutiendo en todos los aprendizajes.
- No encuentro ninguna razón que justifique un aprendizaje con errores.
- Los errores cometidos en el inicio del proceso del aprendizaje de la lectura y de la escritura suelen convertirse, en muchas ocasiones, en irreversibles.
- En principio, no creo mucho en las recuperaciones, pienso que sólo son útiles en contadas ocasiones y en circunstancias que raras veces se dan en los centros educativos. Las recuperaciones, por lo general, necesitan mucho tiempo para ser efectivas (suponiendo que se consiga). Además la jornada escolar no dispone de todo ese tiempo, ya que la ley establece el tiempo que los alumnos pueden salir de clase y aquí ya empezamos mal, porque no todos los niños tiene las mismas necesidades ni todos los niños necesitan el mismo tiempo para recuperar sus dificultades. Por otra parte, hay que dedicar un tiempo considerable a “borrar” aprendizajes erróneos y a enseñar correctamente, de una forma distinta a cómo se aprendió, ya que generalmente ese aprendizaje se ha reforzado durante mucho tiempo.
- Apoyos dentro del aula impartidos por profesoras de P.T o A. y L. Nunca he sido partidaria de este tipo de apoyos porque mi experiencia me demostró continuamente que no son efectivos. Cuando dentro de una misma aula hay dos maestras trabajando con grupos diferentes, un grupo interfiere en el trabajo del otro, se molestan y conseguir que los niños presten atención y que se centren en sus trabajos es muy difícil o imposible. Los apoyos en el aula, desde mi punto de vista, sólo funcionan cuando se apoya de forma continuada y por la misma persona a un solo niño cuyo nivel está muy cerca del nivel medio de la clase, y por tanto, con la ayuda de ese apoyo el alumno puede seguir la marcha de la clase.
- Apoyos generales. A veces tuve que apoyar dentro del aula de forma aislada (aún no tenía A y L.) y los resultados tampoco fueron efectivos. Todos los niños necesitan una enseñanza perfectamente secuenciada pero en el caso de niños con dificultades la secuenciación es un requisito imprescindible. Apoyando una o dos horas semanales a más de un aluno dentro del aula, a veces en un nivel con el que no se tiene relación, a mí me resulta imposible llevar a cabo un trabajo serio con el que se consiga una mejora en el rendimiento del alumno. Me parece una pérdida de tiempo.Considero que recuperar a un alumno de forma efectiva es muy difícil y se necesitan conocimientos, tiempo y mucha dedicación.
- Es imprescindible disponer de un diagnóstico fiable y que la persona que se dedique a llevar a cabo la recuperación tenga los conocimientos suficientes para saber por qué se han producido esos errores, cuándo han empezado a hacerse notables y cómo se deben corregir. Yo estoy sólo a medio camino en los tres puntos citados.
- Propongo un aprendizaje con los menos errores posibles donde no haya nada o poco que recuperar. Cuando un niño se quede atrás, es necesario detectarlo lo antes posible, retomar el camino donde se inicio la dificultad, apoyándolo y reforzando lo que sea necesario. Pienso que en ningún caso se debe seguir el sistema de enseñar mal y luego BORRAR y VOLVER A ENSEÑAR. Suponiendo que la dificultad se “corrija”, si posteriormente no se hace un seguimiento adecuado, acaba perdiéndose lo recuperado y el niño vuelve a hacer uso de lo que tiene más afianzado, que suele ser lo primero que aprendió (que aprendió mal) y que se pretende recuperar. Esto es lo que habitualmente pasa con las recuperaciones. Podría exponer muchas más razones para reforzar esta afirmación.
- Una parte importante de los problemas que tienen los niños se debe a la dificultad que tienen para asociar correctamente grafemas con fonemas. Esto se evita trabajando adecuadamente los fonemas desde el principio, desde que empieza con las vocales.
- La secuenciación es uno de los pilares básicos de mi método. Una secuenciación inadecuada es, en muchos casos, la causa de que un número considerable de niños “se pierdan” y no puedan seguir el ritmo de la clase. Cuando un alumno no es capaz de seguir algo que se está explicando, posiblemente el problema se solucione secuenciando más lo que estamos trabajando. (El niño se “pierde” en el camino porque se están dando “pasos”demasiado “largos” para él).
- La coordinación, importantísima para llevar a cabo cualquier proceso de aprendizaje, es un pilar imprescindible en el área de Lengua. Cambiar de método cuando se está aprendiendo a leer y escribir, perjudica a los niños considerablemente. El aprendizaje debe ir construyéndose poco a poco, peldaño a peldaño, uno encima de otro, apoyando el superior en el inferior (bases sólidas), sin modificar el material. Los cambios ya vendrán más tarde, los harán ellos mismos en su momento sin que nadie se los enseñe pero después de haber conseguido una correcta y sólida estructura.
- El grado de dominio en el área del Lenguaje determina casi todos los aprendizajes y, en gran medida, nos conduce o no al éxito o fracaso escolar.
- El niño necesita su propio método de lectura y escritura, es decir:
Debe conocer, con toda claridad, cuáles son las pautas de la lectura desde el inicio, es decir, debe empezar leyendo bien desde el principio.
Tiene que saber hacer “sus letras” con independencia del tipo de letra que tenga el texto que utilice para trabajar.
Sabemos si un niño tiene “su método”de escritura cuando al pedirle que nos copie una línea de un texto en el que hemos utilizado un tipo de letra del ordenador, lo escribe con su propia letra independientemente de la que se utilice en el texto. Por otra parte, si lo que hace es “dibujar” alguna de las letras del texto, es que no lo ha conseguido, está en proceso.
Libro 1 del Método al Revés de lecto-escritura